Es por eso que, para tener un comportamiento socialmente responsable ante esta emergencia, cada familia debería limitarse al consumo básico y necesario para la alimentación e higiene personal, haciendo un uso del agua de manera responsable y evitando todas las actividades que generan derroche.

Recordemos que Córdoba se encuentra ubicada en una región semiárida donde la disponibilidad de agua depende del régimen de lluvias y su acceso es limitado, y como vemos el estado de los lagos no es el adecuado para esta época por la falta de precipitaciones.

En estos días las dos plantas potabilizadoras que abastecen la ciudad están operando al máximo de su capacidad de producción y de todas maneras se producen problemas en el suministro ya que el consumo por persona por día llega a picos de 450 litros de agua, cuatro veces más de lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud.

Por este motivo, es necesario tomar conciencia social, entendiendo en que el recurso escaso debe llegar a toda la sociedad.

Usemos el agua en forma responsable

Algunas acciones que generan derroche son:

-       El recambio indiscriminado de agua en las piletas por falta de mantenimiento. Una pileta mediana (con medidas aproximadas de 2,70m x 1,60m x 0,65m), contiene unos 2.800 litros de agua, es la cantidad de agua que necesita una persona para cubrir sus necesidades cotidianas durante más de una semana.

-       Riego desmedido y sin control (utilización de riegos artificiales, dejar mangueras abiertas por horas y en horarios no recomendados).

-       Pérdida en instalaciones internas domiciliarias: una pérdida puede derrochar entre 300 y 700 litros por día.

El agua es un recurso limitado, pero nuestro potencial para el cambio es ilimitado. Actuemos en forma socialmente responsable. ¡Cuidá el agua! #veranoresponsable.